Desde las 15.30 horas del miércoles, se vendió un 50 por ciento de las nuevas localidades para el concierto del 20 de mayo.

Bastó con el boca a boca. El comunicado que oficializaba el cambio de recinto ni siquiera había llegado a los medios y las centrales telefónicas de Ticketmaster ya se activaban durante la tarde del miércoles con la petición más reiterada de la temporada: la del concierto de Jonas Brothers.

La esperada primera visita del trío estadounidense fijada para el miércoles 20 de mayo en el Club Hípico (originalmente se realizaría en la misma fecha en la pista atlética), tuvo ayer una rotunda confirmación para los organizadores que buscaban un recinto con más capacidad. En sólo 24 horas (en rigor, desde las 15.30 horas del miércoles, cuando se oficializó la mudanza), se vendieron 5.500 boletos, agotando en más de un 50 por ciento las entradas con que se pretende superar el tope inicial de 25 mil ya vendidas (que era lo que podía recibir la pista).

Los ejecutivos de Time for fun (T4f) informaban ayer que incluso antes de la apertura de los locales donde se efectuaría la venta física (tiendas Falabella y cines Hoyts que abren sus puertas cerca de las 11 horas) ya habían salido cerca de dos mil tickets. El detalle indica que la mayor compra se hizo a través de internet y que el sitio donde más se vendieron entradas fue en el CineHoyts, de La Reina.

La jugada de los productores será parcelada esta vez. Agotada esta "fase", como llaman a las 10 mil entradas que adicionaron el miércoles, se abrirá un nuevo ciclo de venta que debería comenzar el lunes y que consistirá en otros 10 mil boletos disponibles al público para el concierto que comenzará a las 19 horas y que abrirá Demi Lovato.

La producción asegura que se trata de un show de gran envergadura, pero es poco el detalle que entregan sobre el espectáculo que Jonas Brothers presentará en Santiago. Sí se sabe que esta gira mundial, que es la sexta que emprende el trío de Nueva Jersey en sus vertiginosos cuatro años de carrera, ocupa un escenario circular y una gran pantalla líquida que, según los mismos chicos contaron a la revista Billboard en marzo pasado, "añade un efecto muy interesante y que te da la sensación de estar en un mundo totalmente distinto para cuando llegues al estadio y veas el escenario".

La visita a Chile antecede la salida de su cuarto disco -Lines, vines and trying times, con edición prevista para el 16 de junio- y que, de acuerdo a lo que dice el trío, acusa influencias de Kings of Leon y Neil Diamond.